viernes, 5 de junio de 2015

El susto no fue mío

Para muchos de los que me conocen, saben que mi primer trabajo durante los tiempos de la universidad fue en una conocida cadena de cines peruana. Pero muy pocos saben las anécdotas e historias extrañas que me pasaron allí. Procederé a relatar tal y como ocurrió una de ellas.

Verán, durante la segunda mitad de 2012 llegaron al Perú una gran cantidad de películas en formato 3D, tales como: el fin de la trilogía de The Dark Knight, Avengers, La Era del Hielo 4, Madagascar 3, Spider-Man, etc., por lo que pasé mucho de mi tiempo en la conocida sólo por nosotros sala 4 de aquel cine, obviamente en 3D.

Recuerdo que una vez estaba con un equipo de 6 personas en aquella sala, incluyendo un entrenador (algo así como un supervisor) y estábamos a punto de pasar una función de La Era del Hielo 4, en 3D claro, por lo que la sala debía estar lista minutos antes de lo programado, pues habían muchos niños y era mejor esperar a que la sala se llene en el tiempo adecuado a que se llene a empujones.

En ese momento, el entrenador de turno decidió moverse con un grupo de los chicos nuevos a otra sala que necesitaba ser vista; pues ya iba a terminar la función y debían ordenar la salida de los espectadores. Así que me quedé solo con una chica nueva, era la primera vez que la había visto, y fue la última también.

Estuvimos revisando de que todo esté listo y limpio para dar la orden de pasar la sala. Cuando de pronto -en medio de la casi oscuridad de la sala- escuché como la chica lanzó un grito corto y seco, al voltear a ver que había pasado; esta ya había bajado unas cinco gradas de donde estaba y tenía una cara de susto única, lo que me lleva a citar la expresión anglosajona: Her face was priceless. El diálogo ocurrió de la siguiente forma:

- «¿Qué pasó?»

- «¡Acaban de asustarme horrible!»

- «Fueeera, más bien, en vez de decir eso vamos a bajar para que pase la gente, dale.»

- «No puedo, no me siento bien»

- «¿En serio? ¿Qué pasó?»

- «Mira, no estoy bromeando, atrás, -señalando a la última fila- acabo de ver como una niña en vestido blanco ha bajado un par de gradas hacia mí.»

- «OK, bajemos y me cuentas más.»

- «Sí, pero vamos a la gerencia antes que en serio me siento mal.»

Dejamos que las personas entren a la sala y fuimos inmediatamente a la gerencia donde ella contó más de lo ocurrido. Nos contó que en efecto, una niña en vestido blanco y un tanto antiguo había bajado unas gradas en dirección a ella y que esta tenía el rostro de una niña muy bonita a la vista; lo que provocó supongo, que se asuste más. La pobre chica nueva no quiso decir más al respecto.

Lamentablemente tuve que volver para seguir con mis labores, al tiempo que ella se quedaba a descansar. Nunca más la volví a ver luego de ese turno. Al parecer la cambiaron de turno o renunció. Supongo que no era de las personas que soportan sin problemas esos incidentes.

Lo que me contaron después fue que la sala 4 era una de las más curiosas en el cine pues era una de las más grandes y para colmo de males, la mitad de la iluminación no funcionaba, haciendo que sea una sala mucho más oscura que las demás. Decían que siempre "asustaban" allí, pero nunca pasó algo parecido a lo que nos contó aquella chica esa vez. No me enteré ni de su nombre pues no ví su name tag en el momento de lo ocurrido.

Pobres, yo sólo quería ver la peli gratis.

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